LA BARONESA LIBRERIA
El Tano crecio en dos lados: con sus padres, bajo la curva de la General Paz cuando se transforma en la Panamericana, donde la polucion invisibiliza a quienes viven ahi, y en Villa Rosa, en el campo, cuando todavia no era nada, puro yuyo, serpientes y pantanos secretos, donde lo crio su abuela. Tras la muerte de sus padres y de su abuela, el Tano vuelve al barrio, al Triangulo de las Bermudas de esa curva. Alli, ciertos amigos de la infancia lo involucran en esa asociacion ilicita que desarrollan en una cofradia perfecta. El los quiere aunque hara todo lo posible para que no se le acerquen. Ellos no entenderan que el Tano, si se aleja, lo hace por el bien de ellos, por algo que lo persigue y lo arruina todo. Luis Mey es un provocador. Nos presenta un personaje sufrido por el abandono y la frialdad de su familia que interactua con su abuelita. Luego, lejos de transformarlo en un ser debil, hace crecer a Martiniano, el Tano, en sensibilidad y en oscuridad de igual manera. En esta novela feroz, por momentos cruenta, aunque poderosa, Luis Mey delata, sin querer hacerlo, a todo escritor que puede seducir por su escritura pero que se gana la pasion de quien lee cuando construye una historia que exhibe, como en una estanteria, los aspectos humanos mas nobles e innobles que todos llevamos dentro.
El Tano crecio en dos lados: con sus padres, bajo la curva de la General Paz cuando se transforma en la Panamericana, donde la polucion invisibiliza a quienes viven ahi, y en Villa Rosa, en el campo, cuando todavia no era nada, puro yuyo, serpientes y pantanos secretos, donde lo crio su abuela. Tras la muerte de sus padres y de su abuela, el Tano vuelve al barrio, al Triangulo de las Bermudas de esa curva. Alli, ciertos amigos de la infancia lo involucran en esa asociacion ilicita que desarrollan en una cofradia perfecta. El los quiere aunque hara todo lo posible para que no se le acerquen. Ellos no entenderan que el Tano, si se aleja, lo hace por el bien de ellos, por algo que lo persigue y lo arruina todo. Luis Mey es un provocador. Nos presenta un personaje sufrido por el abandono y la frialdad de su familia que interactua con su abuelita. Luego, lejos de transformarlo en un ser debil, hace crecer a Martiniano, el Tano, en sensibilidad y en oscuridad de igual manera. En esta novela feroz, por momentos cruenta, aunque poderosa, Luis Mey delata, sin querer hacerlo, a todo escritor que puede seducir por su escritura pero que se gana la pasion de quien lee cuando construye una historia que exhibe, como en una estanteria, los aspectos humanos mas nobles e innobles que todos llevamos dentro.